En el día de hoy, las Abuelas de Plaza de Mayo anunciaron con inmensa felicidad el encuentro del nieto 133 desde que comenzó la búsqueda de los hijos de sus hijos desaparecidos durante la dictadura cívico-militar.
El comunicado
La asociación, liderada por Estela de Carlotto, emitió un conmovedor comunicado para dar a conocer la gran noticia de la restitución de la identidad del nieto 133.
La asociación convocó a periodistas y medios de comunicación para una conferencia de prensa que se llevó a cabo en el Espacio Memoria y Derechos Humanos. En este evento, presentaron a Miguel “Tano” Santucho, quien finalmente se reencontró con su padre y hermanos.

El nieto 133 es sobrino de Mario Santucho, fundador del Partido Revolucionario de los Trabajadores (PRT) y comandante del Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP).
“A casi 40 años del inicio del período democrático más largo de nuestra historia, seguimos buscando a nuestros nietos y nietas, todos los días. Cada restitución reafirma que el pueblo argentino nos acompaña y decide no olvidar”, destacaron desde las Abuelas.
Casos recientes de reencuentro
Los últimos dos casos de nietos recuperados por las Abuelas ocurrieron en diciembre de 2022, poco después del triunfo de la Selección Argentina en el Mundial, cuando conmovieron al país al expresar “nos volvimos a ilusionar”.
La historia del nieto 133
El nieto 133 es hijo de Cristina Navajas, una docente y militante del Partido Revolucionario de los Trabajadores (PRT), quien se vinculó con Julio Santucho, padre de su hijo.
Cristina era la mayor de dos hermanos y estudiaba Sociología en la UCA cuando conoció a Julio César Santucho y se unió al PRT, donde comenzó a militar. El 13 de julio de 1976 fue secuestrada en su domicilio, estando embarazada de 2 meses. Se estima que su hijo nació en cautiverio en febrero de 1977.

Miguel fue anotado como hijo propio por un militar y una enfermera el 24 de marzo de 1977. Con valentía, se acercó por su cuenta a Abuelas y, después de diversos estudios, el Banco Nacional de Datos Genéticos notificó su identificación el 26 de julio.
La familia Santucho ha sufrido numerosas pérdidas debido a detenciones, asesinatos y exilios. Diez de sus miembros continúan desaparecidos y aún buscan a un niño.